Rosario Giraberte, lectora de Morón Información, nos cuenta lo que le sucedió el pasado martes cuando iba caminando por los alrededores del CEIP Padre Manjón.
“Me dirigía hacia el trabajo, ya a la altura del Bar Moral y el colegio Padre Manjón, metí el pie en un agujero que se está formando justo al bajar la acera.
Llamé al Ayuntamiento para comunicarlo y explicar que por poco me parto el pie, que lo que tengo son rasguños y unos zapatos rotos, porque gracias al tacón no entro más hondo. Mi preocupación es que está al lado de un colegio y un niño puede meter el pie.
He vuelto a pasar por la zona por si han puesto alguna señal y no hay nada. Vuelvo a llamar para informar de que yo veo un peligro para los niños y me contestan que ya han dado parte, que si el encargado no ha tomado medidas todavía es porque no ve el peligro que yo creo.
Para terminar, quisiera volver a darle las gracias a la persona que me ayudó a levantarme, pues el pie se quedó atravesado y no podía sacarlo”.